Descubre todo lo que necesitas saber sobre los periquitos: sus variedades más populares, cómo cuidarlos, adiestrarlos y garantizar su felicidad en casa.

Los periquitos han conquistado hogares en todo el mundo gracias a su carisma, colores vibrantes y canto alegre. A pesar de su pequeño tamaño, estas aves esconden una gran personalidad y una capacidad de socialización sorprendente. Originarios de diversas regiones, no solo son fascinantes por su apariencia, sino también por el vínculo especial que pueden formar con sus dueños.
Desde los clásicos periquitos australianos hasta variedades menos comunes, como los de Bourke o los espléndidos, cada especie tiene algo único que ofrecer. Este artículo te ayudará a comprender mejor sus características, cómo cuidarlos, y por qué son considerados compañeros ideales para quienes buscan una mascota alada.
Variedades de Periquitos: Más Allá de los Australianos
Aunque al pensar en periquitos la mayoría visualiza a los clásicos australianos, existe un mundo de variedades que muchas personas desconocen. Cada especie tiene características únicas que las hacen especiales, desde su apariencia hasta su comportamiento. A continuación, exploraremos algunas de las más fascinantes.
Periquito de Bourke
El periquito de Bourke (Neopsephotus bourkii) es conocido por su temperamento tranquilo. A diferencia de los australianos, es más activo al amanecer y al atardecer, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes prefieren aves menos ruidosas. Su plumaje rosa pálido y gris suave añade un toque delicado y atractivo que lo distingue de otras especies.
Periquito Espléndido
También conocido como Neophema splendida, el periquito espléndido hace honor a su nombre. Con un pecho rojo vibrante y tonos azules y verdes en su cuerpo, es una verdadera obra de arte viviente. Además de su belleza, es una especie pacífica que se adapta bien a convivir con otras aves si el espacio es adecuado.
Periquito Monje
El periquito monje (Myiopsitta monachus) es una de las variedades más sociales e inteligentes. Es conocido por su habilidad para imitar sonidos, llegando incluso a aprender palabras si se le dedica suficiente tiempo. Su carácter juguetón y su capacidad para formar vínculos fuertes con sus cuidadores lo hacen un compañero encantador, aunque requiere más interacción que otras especies.
Periquito Alas Doradas
Originario de Sudamérica, el periquito alas doradas (Brotogeris chrysoptera) tiene un plumaje verde con toques amarillos en sus alas que le dan su nombre. Es una especie activa y curiosa que disfruta explorando y jugando con todo lo que encuentre en su entorno.
Cada variedad de periquito tiene algo único que ofrecer, ya sea su aspecto, temperamento o necesidades. Antes de elegir uno, es importante investigar y conocer cuál se adapta mejor a tu estilo de vida y a las condiciones que puedes ofrecerle. Optar por una especie menos conocida, como el espléndido o el de Bourke, puede ser una experiencia enriquecedora y diferente, mientras que los periquitos australianos siguen siendo una elección perfecta para principiantes por su fácil manejo y naturaleza social.
Todo sobre los Periquitos Australianos: Los Favoritos del Hogar
Los periquitos australianos (Melopsittacus undulatus) son, sin duda, las estrellas del mundo de las aves domésticas. Su carácter sociable, su tamaño compacto y su espectacular paleta de colores los convierten en una de las mascotas más populares en todo el mundo. Si bien son pequeñas, estas aves tienen una personalidad enorme que las hace irresistibles para los amantes de los animales.
Origen y Hábitat Natural
Originarios de Australia, los periquitos australianos habitan en regiones semiáridas, donde se mueven en grandes bandadas en busca de agua y alimento. En su entorno natural, su plumaje verde con franjas negras en las alas los ayuda a camuflarse entre la vegetación. Esta adaptabilidad ha sido clave para su supervivencia en climas extremos.
Variedad de Colores
Aunque el periquito verde es el más común en la naturaleza, la cría en cautiverio ha dado lugar a una increíble variedad de colores. Entre los más populares están los periquitos amarillos, blancos, azules y hasta rosados. Estas mutaciones genéticas han ampliado la gama estética, haciendo que cada ejemplar sea único. Los periquitos albinos, con su plumaje blanco puro y ojos rojos, son particularmente llamativos y suelen ser muy valorados por los criadores.
Una de las historias que siempre recuerdo en mi consulta fue la de un periquito albino. Este ejemplar no solo cautivó a su familia por su apariencia única, sino también por su carácter cariñoso. Es importante destacar que los periquitos requieren estimulación constante, algo que muchas veces se subestima al elegirlos como mascotas.
Comportamiento y Socialización
Los periquitos australianos son aves muy sociales y activas, lo que los convierte en compañeros ideales para quienes desean una mascota interactiva. Disfrutan de la compañía humana y, si se les dedica tiempo y paciencia, pueden aprender a posarse en la mano, responder a su nombre e incluso imitar palabras simples.
Una de las experiencias más entrañables que he tenido fue con un periquito que, a pesar de su tamaño, mostraba una gran capacidad para interactuar con toda la familia. Su juguete favorito era un pequeño espejo, donde parecía «conversar» durante horas. Este tipo de comportamiento demuestra la inteligencia y curiosidad que caracteriza a esta especie.
Longevidad y Cuidados Básicos
Con el cuidado adecuado, los periquitos australianos pueden vivir entre 8 y 12 años, e incluso más en algunos casos. Esto incluye una dieta equilibrada que combine semillas, frutas, vegetales frescos y suplementos. También es esencial proporcionarles una jaula espaciosa y segura, con juguetes que mantengan su mente activa.
No menos importante es permitirles tiempo fuera de la jaula para volar y explorar, algo fundamental para su bienestar físico y emocional. Un periquito australiano feliz es aquel que tiene un entorno enriquecido y la oportunidad de formar un vínculo estrecho con sus cuidadores.
Los periquitos australianos son la elección perfecta para quienes buscan una mascota alada llena de energía y ternura. A pesar de ser pequeños, su impacto en un hogar es enorme, llenándolo de vida y alegría. Adoptar uno significa comprometerse a cuidarlo y a disfrutar de todo el amor y las risas que aportan con sus travesuras y cantos. Si estás buscando un compañero que sea tan sociable como colorido, los periquitos australianos seguramente cumplirán tus expectativas.
Cómo Elegir y Comprar Periquitos

Elegir un periquito es un momento emocionante, pero también una decisión que debe tomarse con cuidado. Estas pequeñas aves, además de ser coloridas y sociables, son compañeras de vida que requieren atención y dedicación. Antes de comprar periquitos, hay algunos factores clave que debes considerar para asegurarte de elegir el ave adecuada y de garantizar su bienestar desde el principio.
¿Dónde Comprar un Periquito?
Al buscar periquitos en venta, es fundamental optar por fuentes confiables, como criadores especializados o tiendas de mascotas con buena reputación. Los criadores responsables suelen tener aves bien cuidadas y estarán dispuestos a responder todas tus preguntas sobre la salud y el origen del ave. También puedes considerar adoptar un periquito en refugios para animales, donde muchas veces hay aves en busca de un hogar amoroso.
Evita comprar periquitos en mercados o lugares donde las condiciones de los animales parezcan deficientes, ya que esto puede resultar en problemas de salud a largo plazo y fomenta prácticas irresponsables.
Cómo Identificar un Periquito Saludable
Un periquito sano es activo y curioso, mostrando interés por su entorno. Aquí tienes algunas señales a las que debes prestar atención:
- Plumaje brillante y limpio: Las plumas deben estar completas y bien cuidadas, sin signos de pérdida o desorden.
- Ojos claros y brillantes: Evita aves con ojos enrojecidos, irritados o que tengan secreciones.
- Narinas limpias: Las fosas nasales deben estar libres de obstrucciones o acumulación de secreciones.
- Movimiento activo: Un periquito saludable se mueve con agilidad, no está apático ni letárgico.
Si es posible, observa cómo interactúa con otros periquitos. Un ave sociable y alerta es una buena señal de que está sana y bien adaptada.
Factores a Tener en Cuenta al Elegir un Periquito
Además de la salud general, es importante elegir un periquito que se adapte a tu estilo de vida y preferencias. Por ejemplo, los periquitos amarillos o blancos pueden ser llamativos y populares por su aspecto único, mientras que los tradicionales verdes o azules suelen ser los más comunes.
Si buscas un ave que pueda aprender trucos o palabras, opta por un periquito joven, ya que son más receptivos al entrenamiento. Además, considera si prefieres tener uno o más periquitos. Si bien un único periquito puede desarrollar un vínculo más fuerte contigo, tener dos o más asegura que puedan socializar entre ellos, especialmente si pasas mucho tiempo fuera de casa.
El Entorno Adecuado para Recibir a tu Periquito

Antes de llevar a tu nuevo amigo a casa, asegúrate de tener todo preparado. Una buena jaula para periquitos debe ser lo suficientemente grande para permitir que el ave se mueva cómodamente. También es importante incluir perchas, juguetes y recipientes para comida y agua.
Recuerda que, al principio, es normal que el periquito necesite tiempo para adaptarse a su nuevo hogar. Dale espacio y evita manipularlo demasiado los primeros días. Pronto se sentirá seguro y comenzará a explorar su entorno.
Elegir y comprar un periquito es solo el comienzo de una relación que puede durar años. Invertir tiempo en investigar y preparar un buen entorno marcará la diferencia en la salud y felicidad de tu ave. Ya sea que optes por un periquito clásico o uno de colores más exóticos, asegúrate de brindarle el cuidado y la atención que merece. ¡El amor y la alegría que aportará a tu vida valdrán cada esfuerzo!
Cuidando a tu Periquito: Espacio, Alimentación y Bienestar

Tener un periquito como mascota es una experiencia maravillosa, pero también conlleva una gran responsabilidad. Estas pequeñas aves son inteligentes, activas y muy sociables, por lo que necesitan un entorno que les permita desarrollar todo su potencial. Aquí te comparto algunos consejos clave para cuidar de tu periquito y asegurarte de que sea feliz y saludable.
Un espacio que inspire libertad y diversión
El primer paso para cuidar a un periquito es ofrecerle un espacio adecuado. Su jaula debe ser amplia y cómoda, lo suficientemente grande como para que pueda volar de un lado a otro sin obstáculos. A los periquitos les encanta explorar y mantenerse en movimiento, así que asegúrate de que no se sientan confinados. Recuerda que volar no solo es un ejercicio físico, sino también una manera de liberar el estrés y mantener su mente activa.
Además, los juguetes son esenciales. Pero no cualquier juguete: elige aquellos que estimulen su inteligencia, como columpios, escaleras y juguetes interactivos que puedan picotear o manipular. Para evitar que se aburran, rota los juguetes regularmente y crea pequeños desafíos dentro de la jaula, como organizar espacios para escalar o esconder alguna golosina saludable. Estas actividades no solo lo entretendrán, sino que también reforzarán el vínculo que tienes con tu periquito.
La alimentación: más que solo semillas
La dieta de un periquito es otro aspecto fundamental para su bienestar. Aunque muchas personas recurren únicamente a las mezclas de semillas comerciales, es importante saber que esto no es suficiente para cubrir todas sus necesidades nutricionales.
Una alimentación equilibrada debe incluir:
- Frutas y vegetales frescos: Pueden ser trozos pequeños de manzana, zanahoria, espinaca o pimientos. Introduce los nuevos alimentos poco a poco para observar cuáles prefiere.
- Suplementos ocasionales: En especial calcio, que es crucial para su salud ósea, y se puede ofrecer mediante bloques de calcio o huesos de jibia.
- Mezclas de semillas de calidad: Elige aquellas que no estén demasiado procesadas ni tengan excesos de grasas.
Es importante recordar que hay alimentos que son tóxicos para los periquitos, como el chocolate, el aguacate, la cafeína o cualquier alimento procesado. Siempre consulta con un veterinario especializado en aves para ajustar su dieta según sus necesidades.
Pequeños gestos para un gran bienestar
Por último, dedica tiempo a interactuar con tu periquito. Estas aves son animales sociales que prosperan con la compañía, ya sea la de otros periquitos o la tuya. Habla con ellos, déjalos explorar fuera de la jaula bajo supervisión, y préstales atención diaria para que se sientan parte de tu rutina. Si le ofreces un entorno rico en estímulos, una dieta variada y, sobre todo, cariño, tu periquito será un compañero alegre y saludable durante muchos años.
El Arte de Adiestrar Periquitos: Paciencia, Confianza y Resultados

Adiestrar a un periquito puede parecer una tarea difícil al principio, pero con un poco de paciencia, dedicación y las técnicas adecuadas, no solo es posible, sino también muy gratificante. Estos pequeños compañeros son aves inteligentes y curiosas, lo que los hace ideales para el entrenamiento si sigues algunos pasos clave.
El entorno ideal para empezar
El primer paso es crear un ambiente tranquilo y seguro donde tu periquito se sienta cómodo. Busca un espacio libre de distracciones, lejos de ruidos fuertes o movimientos bruscos que puedan asustarlo. La calma es esencial, ya que cualquier signo de estrés puede dificultar el aprendizaje.
Una vez que el entorno esté preparado, dedica tiempo a observar a tu periquito. ¿Se muestra curioso o reservado? Comprender su comportamiento natural te ayudará a adaptar tu enfoque y a identificar el mejor momento para iniciar las sesiones de entrenamiento.
Construyendo la confianza paso a paso
Antes de enseñar trucos o comandos, es fundamental establecer una relación de confianza. Esto no sucede de la noche a la mañana, pero pequeños gestos diarios pueden marcar una gran diferencia. Comienza permitiendo que el ave se acostumbre a tu presencia. Acércate lentamente a su jaula, háblale con un tono suave y evita movimientos rápidos.
Cuando notes que tu periquito se siente cómodo contigo cerca, puedes empezar con ejercicios básicos, como acostumbrarlo a tu mano. Para ello, ofrece pequeñas recompensas, como semillas de mijo, desde fuera de la jaula. Cuando confíe en ti lo suficiente para acercarse, intenta colocar tu mano dentro, sin presionarlo. Este paso puede llevar días o incluso semanas, pero la clave está en ser constante y respetar su ritmo.
El poder del refuerzo positivo
La paciencia y el refuerzo positivo son tus mejores aliados. Cada vez que tu periquito haga algo que deseas reforzar, como acercarse a tu mano o realizar un pequeño vuelo hacia ti, recompénsalo inmediatamente con algo que le guste. Las pequeñas semillas, especialmente las de mijo, son una excelente opción, pero también puedes usar palabras cariñosas o caricias si ya se siente cómodo con ellas.
Es importante mantener las sesiones de entrenamiento cortas y frecuentes. Los periquitos tienen una capacidad de atención limitada, así que 10-15 minutos por sesión son suficientes para evitar que se aburran o frustren. Finaliza siempre en un punto positivo, recompensando su esfuerzo, incluso si no logró todo lo que esperabas.
Progresando hacia ejercicios más complejos
Cuando tu periquito ya confía en ti, puedes avanzar hacia ejercicios más elaborados, como enseñarle a posarse en tu dedo, volar hacia ti al llamarlo o incluso realizar pequeños trucos. Recuerda que cada ave es diferente y aprenderá a su propio ritmo. La repetición es fundamental, pero también lo es tu disposición a adaptarte y celebrar cada pequeño avance.
El adiestramiento de un periquito no solo es una oportunidad para enseñarle habilidades, sino también para fortalecer el vínculo entre ambos. Más allá de los trucos, el proceso está lleno de momentos de conexión y aprendizaje mutuo. Así que relájate, disfruta de cada paso y celebra el arte de comunicarte con tu pequeño amigo alado.
Los Periquitos Cantando: Más que Melodía, un Indicador de Felicidad

El canto de un periquito es una de las cosas más encantadoras que puedes experimentar al tenerlos como mascotas. No solo llena el hogar de una música alegre y única, sino que también dice mucho sobre su estado de ánimo y bienestar. Es su manera de comunicarse, expresar emociones y mostrar que están felices y cómodos en su entorno.
El canto como reflejo de felicidad
Cuando un periquito canta, generalmente está en su mejor momento emocional. Estos sonidos melódicos son una señal de que se sienten relajados, seguros y conectados con su entorno. Es su forma de decirnos: “Estoy bien aquí”. Por eso, cuando escuchas a tu periquito cantar durante el día, puedes estar seguro de que estás haciendo un buen trabajo cuidándolo.
Sin embargo, cada periquito tiene su propia personalidad. Algunos son más “habladores” que otros, y mientras algunos pueden cantar todo el día, otros pueden ser más reservados. Lo importante es que, sea cual sea su ritmo, el canto natural debe ser espontáneo y variado, sin señales de angustia.
Cómo estimular el canto de tu periquito
Aunque el canto es una conducta natural, hay formas de estimularlo y disfrutar aún más de esta maravillosa característica. Aquí te comparto algunas ideas que siempre me han funcionado:
- Háblale frecuentemente: A los periquitos les encanta imitar sonidos y responder a nuestras palabras. Hablarles con frecuencia y en un tono suave no solo fomenta el canto, sino que también refuerza el vínculo entre ustedes.
- Pon música tranquila: Descubrí que la música suave o relajante tiene un efecto positivo en ellos. Si encuentras melodías que disfruten, notarás cómo se animan y comienzan a cantar. Incluso puedes probar con grabaciones de otros periquitos cantando.
- Ambiente relajado: Un entorno tranquilo, con una jaula limpia, juguetes para entretenerse y una buena ubicación, es clave para que un periquito se sienta feliz y tenga ganas de cantar.
Cuando el canto se detiene: señales de alerta
Si tu periquito deja de cantar de repente o emite sonidos repetitivos y extraños, es momento de prestar atención. Esto puede ser un indicador de que algo no está bien. Algunas posibles razones incluyen:
- Estrés: Cambios en su entorno, ruidos fuertes o la falta de interacción pueden hacerlo sentir inseguro.
- Aburrimiento: Los periquitos son animales sociales y activos; si no tienen suficientes estímulos, su conducta puede cambiar.
- Problemas de salud: Si notas otros síntomas, como falta de apetito, plumas erizadas o letargo, es importante consultar a un veterinario especializado en aves.
El canto como vínculo emocional
Más allá de ser un reflejo de su bienestar, el canto también es una oportunidad para crear una conexión especial con tu periquito. Escuchar sus melodías y responderle con palabras o sonidos puede fortalecer ese vínculo único entre tú y tu pequeña ave.
El canto de un periquito no es solo un adorno sonoro en tu hogar, es una ventana a su felicidad y estado de ánimo. Escúchalo con atención, disfruta de sus melodías y no olvides devolverle el favor ofreciéndole el amor y cuidado que necesita para seguir cantando.
¿Cuánto Cuesta un Periquito? Más Allá del Precio
Si estás pensando en tener un periquito como mascota, es posible que te llame la atención su precio inicial, que puede variar entre 10 y 50 euros según la variedad y el lugar donde lo compres. Sin embargo, el costo real va mucho más allá del precio de compra.
Gastos básicos para su bienestar
- Jaula adecuada: Una jaula espaciosa y segura puede costar entre 40 y 100 euros o más, dependiendo de su tamaño y calidad.
- Alimentación: Una dieta equilibrada que incluya mezclas de semillas, frutas y vegetales frescos implica un gasto regular, aunque accesible.
- Accesorios y juguetes: Los periquitos necesitan juguetes para mantenerse activos y mentalmente estimulados, lo que puede sumar unos 10-30 euros al mes.
- Veterinario: Las revisiones periódicas y cualquier cuidado médico especial también son gastos a tener en cuenta.
El valor emocional
Más allá del dinero, el verdadero «costo» de tener un periquito está en el compromiso y el tiempo que dedicarás a garantizar su felicidad y bienestar. Los momentos de alegría que te brindará tu pequeño amigo alado son invaluables y hacen que cualquier inversión valga la pena.
Cuidar a un periquito implica mucho más que un gasto inicial, es una experiencia que enriquecerá tu vida.
Conclusión: Un Hogar con Periquitos es un Hogar Lleno de Vida
Los periquitos son más que simples mascotas, son compañeros llenos de energía, color y personalidad. Con los cuidados adecuados, estas aves pueden vivir hasta 10 años o más, alegrando cada día con su canto y curiosidad innata.
Adoptar un periquito significa comprometerte a cuidar de un ser inteligente y social que, a cambio, llenará tu vida de momentos inolvidables. Si decides dar este paso, recuerda que detrás de esos pequeños ojos brillantes hay un alma llena de amor y energía esperando descubrir el mundo junto a ti.
Si te interesa aprender más sobre el cuidado y las características de diferentes tipos de mascotas, puedes encontrar más información aquí.
Nota importante: Antes de adoptar cualquier mascota, asegúrate de que la especie está permitida en tu lugar de residencia, ya que las normativas sobre tenencia de animales pueden variar según la región.
Preguntas Frecuentes
Los periquitos australianos son una de las especies más comunes y apreciadas por su pequeño tamaño, sus colores vibrantes y su carácter sociable. En comparación con otras variedades de periquitos más grandes, como los periquitos de Colombia o los periquitos monje, los australianos tienen una mayor facilidad para adaptarse a espacios pequeños y su cuidado es relativamente sencillo. Son aves que aprenden rápidamente a interactuar con las personas, se sienten cómodos en entornos tranquilos y son ideales para quienes buscan un compañero de bajo mantenimiento. Otras variedades pueden tener características físicas o temperamentos diferentes, o necesitar cuidados más específicos, como más espacio o un ambiente con temperaturas muy controladas.
El adiestramiento de un periquito comienza con el establecimiento de confianza. Mi consejo es que empieces en un entorno tranquilo y sin distracciones. Habla con él suavemente para que se acostumbre a tu voz. Luego, ofrécele golosinas, como pequeñas semillas, desde tu mano, para que asocie tu presencia con algo positivo. Cuando el periquito se sienta más cómodo, intenta que se posen sobre tu dedo o tu mano, pero hazlo poco a poco, sin forzarlo. Recuerda ser constante y paciente: la repetición es la clave. Evita movimientos bruscos o ruidos fuertes, ya que podrían asustarlo y retroceder el proceso. Con el tiempo, tu periquito empezará a confiar en ti y aceptará la interacción de manera más natural.
Cuidar de un periquito australiano es relativamente sencillo si le proporcionas lo básico. Necesita una jaula espaciosa donde pueda moverse libremente y tener acceso a perchas de diferentes tamaños para mantener sus patas saludables. Es importante proporcionarle una dieta equilibrada, que incluya semillas, frutas frescas como manzanas y plátanos, y vegetales como zanahorias y espinacas. Además, deben tener agua fresca disponible en todo momento. Asegúrate de que salga de su jaula al menos una hora al día para volar y hacer ejercicio, y nunca olvides limpiar su espacio con regularidad. Los periquitos son aves sociales, así que también es esencial que les brindes atención y compañía para evitar el aburrimiento.
La alimentación de un periquito debe ser equilibrada y variada. Asegúrate de incluir una mezcla de semillas como el alpiste, pero también complementa su dieta con frutas y verduras frescas. Me encanta ofrecerles manzana, zanahoria, pepino y brócoli, ya que son opciones que a ellos les encantan y les aportan nutrientes esenciales. También es importante incluir suplementos como hueso de sepia, que les ayuda a obtener el calcio necesario para sus huesos. Evita darles alimentos procesados, dulces o salados, ya que pueden causarles problemas digestivos y otros problemas de salud. Con una dieta balanceada, tu periquito estará feliz y saludable.
Los periquitos necesitan al menos de 1 a 2 horas al día para volar fuera de su jaula. Este tiempo les permite ejercitar sus alas, liberar energía y evitar el estrés. Durante este tiempo, asegúrate de que el espacio sea seguro, sin ventanas abiertas, cables o peligros. Los periquitos disfrutan explorar su entorno, así que este ejercicio también es clave para su bienestar mental, ya que les permite ser más activos y estimulados. Si tienes más de un periquito, lo ideal es que todos tengan la oportunidad de volar juntos, fomentando el vínculo social.
Sí, los periquitos son aves muy sociales, y tener más de uno puede ser muy beneficioso para ellos. En mi experiencia, los periquitos disfrutan mucho de la compañía de sus semejantes, y esto les ayuda a mantenerse activos, felices y libres de aburrimiento. Si decides tener varios periquitos, asegúrate de que la jaula sea lo suficientemente grande para que todos tengan espacio para moverse sin sentirse apretados. También es importante que cada ave tenga acceso a comida, agua y un lugar donde descansar cómodamente. Asegúrate de supervisar al principio que no haya peleas entre ellos, ya que pueden surgir rivalidades, pero generalmente se llevan bien si hay espacio suficiente.
La jaula ideal para un periquito debe ser lo suficientemente grande como para que pueda moverse, volar y estirar sus alas sin restricciones. Como mínimo, la jaula debe tener 50 cm de largo, 30 cm de ancho y 45 cm de alto. Sin embargo, cuanto más grande, mejor. Si tienes más de un periquito, te recomiendo optar por una jaula aún más amplia para que todos tengan suficiente espacio para moverse sin sentirse incómodos. Además, asegúrate de que la jaula tenga perchas de diferentes tamaños, juguetes y elementos que estimulen su actividad física y mental.
La diferencia más fácil de notar entre un periquito macho y una hembra es la cera, que es la parte carnosa que se encuentra justo encima del pico. En los periquitos machos adultos, la cera suele ser de un color azul brillante, mientras que en las hembras es de un tono marrón o beige. Sin embargo, en los periquitos jóvenes, estas diferencias no son tan evidentes, y puede ser más difícil distinguirlos al principio. A medida que maduran, la diferencia se hace mucho más clara. También se cree que los machos tienden a cantar más y a ser más ruidosos, mientras que las hembras, aunque también son activas, suelen ser un poco más tranquilas.